Planta herbácea, anual, rústica. Florece en mayo-agosto. Los frutos
maduran a partir de primeros de junio. Pleno sol o semi-sombra. También
se cultiva bien en maceta en interiores, regando con regularidad.
Resistente a las heladas (hasta -15 ºC). Suelo ligero, mullido, bien
drenado, rico en materia orgánica, suficientemente húmedo, fresco. No
prospera en tierra arcillosa, pesada o mal drenada ni en terrenos
húmedos. En verano necesita riegos frecuentes, aunque con ellos pierde
mucho de su aroma. Se deben quitar las flores en cuanto aparezcan, ya
que con la floración la planta pierde el sabor. |